A menos de una hora de camino desde Madrid y ubicado en plena Sierra de Guadarrama, el Real Sitio de San Lorenzo del Escorial, considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, cuenta dentro de sus límites con la que es catalogada por algunos como la octava maravilla del mundo, el Real Monasterio y Palacio de San Lorenzo del Escorial.
Dicha construcción fue ordenada erigir por el rey Felipe II como conmemoración de la victoria de las tropas españolas en la batalla de San Quintín en el año 1557 y en honor de San Lorenzo, cuya festividad se celebra el 10 de agosto, día en que tuvo lugar la mencionada victoria.
Su propósito era que este conjunto sirviera como panteón de la monarquía española, aparte de poder ser utilizado también como residencia oficial de la Familia Real así como monasterio de los monjes de la Orden de San Jerónimo, fundadores de este último.
Este proyecto supuso, por lo tanto, un gran auge para esta localidad ya que fue necesario levantar diversas construcciones para albergar a la Corte, funcionarios, etc…; siempre siguiendo una perfecta armonía con respecto al edificio principal, lo que convierte a este lugar en uno de los enclaves más bellos de la Comunidad de Madrid.
Además, a unos 10 km se encuentra el Valle de los Caídos, ordenado construir tras la Guerra Civil Española. Destacan aquí la gran cruz de 150 m y la abadía, excavada directamente en el interior de la montaña, y que también se puede visitar.